La primera mesa de mediación en La Rioja y sus cimientos para el futuro
El diálogo y la mediación han sido siempre herramientas clave en la resolución de conflictos, especialmente en aquellos donde las diferencias de percepción y la complejidad social se entrelazan con cuestiones ambientales. En La Rioja, un proceso de mediación pionero sentó las bases para abordar la coexistencia de ganadería extensiva y lobos, un conflicto que ha resonado a lo largo de los años.
Contexto y necesidad de mediación
El escenario previo al proceso de mediación en La Rioja estuvo marcado por una situación compleja, donde las percepciones y posturas divergentes sobre la gestión del lobo y la ganadería extensiva requerían de un enfoque innovador. El Gobierno de La Rioja, consciente de la necesidad de una mirada diferente, apostó por un proceso de mediación participativa asistido por la experiencia técnica de la Fundación Entretantos.
Diseño de un proceso participativo
El equipo técnico encargado del proceso diseñó un esquema de mediación de doble vía, alternando entre una mesa social, que se encargaría de elaborar propuestas consensuadas, y una mesa interadministrativa. Este diseño buscaba generar soluciones prácticas y viables a los problemas derivados del conflicto.
El diagnóstico previo fue esencial para identificar a los principales actores, sus discursos y las barreras técnicas y sociales que enfrentaban. A partir de este análisis, se constituyeron la Mesa Social del Lobo y la Ganadería Extensiva y una Mesa Interadministrativa, integrando diversas voces del conflicto, desde expertos independientes y representantes de asociaciones agrarias hasta miembros de organizaciones ambientalistas.
La creación de la Mesa Social, promovida por el Gobierno de La Rioja, fue un paso decisivo hacia la inclusión y la representación equilibrada de los sectores involucrados. Las personas convocadas a la mesa fueron las encargadas de llevar las voces y las inquietudes de sus respectivos sectores, más allá de sus opiniones personales, lo que permitió alcanzar acuerdos más representativos y equitativos.
Decreto 12/2023, de 5 de abril. Plan de Gestión del lobo (Canis Lupus) en La Rioja y su coexistencia con la ganadería extensiva
El proceso de mediación culminó con la firma de todos los participantes y la aprobación del Gobierno de La Rioja del Decreto 12/2023, de 5 de abril, por el que se aprueba el Plan de Gestión del lobo (Canis lupus) en La Rioja y su coexistencia con la ganadería extensiva, reflejo del compromiso de múltiples sectores.
Representantes de la ARAG-ASAJA, Ecologistas en Acción de La Rioja, UAGR, Amigos de la Tierra, entre otros expertos independientes, se reunieron bajo el principio de la representación sectorial más que personal. Este esfuerzo colectivo culminó en un plan que integra las diferentes perspectivas y necesidades del entorno.
El punto culminante del proceso fue la elaboración de un documento de consenso que establecía las bases y criterios para la redacción de planes sobre ganadería extensiva y la gestión del lobo en La Rioja. Este documento no solo reflejaba los acuerdos alcanzados en la mesa social, sino que también delineaba temas de trabajo como la gestión territorial, la prevención de daños y la participación ciudadana, así como estrategias de educación ambiental.
Compromiso con la comunicación, divulgación y educación ambiental
Un compromiso crucial firmado por todos los integrantes de la mesa fue el de trabajar en la comunicación, divulgación y educación ambiental sobre la problemática del lobo y la ganadería. Este acuerdo representa un punto de partida fundamental para el Proyecto Dipaloga, que se propone específicamente continuar con estos esfuerzos.
Este proceso participativo no solo resultó en la formulación de una estrategia conjunta para la gestión del lobo y la ganadería extensiva en La Rioja en un documento de validez legal, sino que también sirvió como cimiento para proyectos posteriores como Dipaloga, que pretende dar continuidad y expansión al diálogo y la colaboración en pos de una coexistencia sostenible y respetuosa entre la biodiversidad y las actividades humanas.
Las conclusiones y el trabajo realizado en La Rioja marcan un punto de partida esencial para el Proyecto Dipaloga, que pretende dar continuidad a estos esfuerzos. Dipaloga se alza sobre el legado de la mesa de mediación precedente, con el objetivo de seguir entrelazando los ámbitos rural y urbano y promoviendo prácticas que permitan una convivencia sostenible entre la ganadería y la fauna silvestre.
El proceso de mediación en La Rioja demostró que, mediante el diálogo y la colaboración, es posible alcanzar acuerdos que respeten y valoren tanto las necesidades del sector ganadero como las exigencias de conservación. Este es el sendero que Dipaloga aspira a recorrer, fortaleciendo las relaciones y construyendo un futuro colectivo donde la convivencia sea la norma y no la excepción.